Las huellas dactilares halladas en una lata de cerveza fueron la evidencia clave para que la Policía de la Ciudad pudiera detener al femicida de una mujer de 43 años embarazada de tres meses, hecho ocurrido en un albergue transitorio del barrio de Palermo.
El asesinato ocurrió el 7 de diciembre del 2020, cuando una mujer fue encontrada con heridas de arma blanca en distintas partes del cuerpo y bajo los efectos del alcohol en la habitación del establecimiento situado en Darregueyra al 2400. Efectivos de la Comisaría Vecinal 14 se dirigieron al hotel por un llamado del 911. La víctima estaba en la cama con cortes en el pecho, mientras que en el cuarto había manchas de sangre, un cuchillo, latas de cerveza y un teléfono celular. El SAME la trasladó a la mujer al Hospital Fernández, donde falleció producto de las heridas.
Además, fuentes cercanas a la investigación le confirmaron que la mujer transitaba un embarazo no mayor a tres meses . Tras el pedido de la fiscalía a cargo de investigar al femicida encontraron en los antecedentes de la víctima que había presentado una denuncia por violencia de género en octubre de 2020 contra un hombre llamado Rubén quien fue detenido y puesto a disposición de la Justicia.
Al mismo tiempo, los investigadores se entrevistaron con la hermana de la víctima en su domicilio del Barrio Mitre, que les informó que ella ya no vivía ahí, pero que el día anterior al crimen había estado de visita junto a un hombre al que llamaba «El Paraguayo», pero que su nombre sería Hugo. El juzgado pidió también buscar a esta persona.
Los peritos forenses hallaron en la habitación del hotel tres pares de huellas en las latas de cerveza, dos pertenecían a la víctima y otra a una persona que podría ser el asesino.
Las huellas fueron analizadas en los laboratorios de la Policía Científica con el Sistema Automático de Identificación de Huellas Dactilares y Palmares (Apfis) de la Policía de la Ciudad, donde se pudo generar una impronta clara para cotejarla con los archivos y obtener una identidad.
Así un hombre, de 33 años,que tenía antecedentes por robo, aparecía en una causa por lesiones en la Comuna 6 y estaba internado en el Hospital Piñero. Ante esta situación, el juzgado interviniente dispuso el traslado del imputado a la Comisaría Vecinal 14 A. Al mismo tiempo, se dictó la liberación del otro sospechoso.
Los especialistas explican que para que una huella dactilar sea apta y pueda ser insertada en el sistema tiene que tener determinadas características, por eso se utilizan diferentes reactivos o dispositivos, como la Cámara de Cianoacrilato, donde se ingresan los elementos y se pueden verificar las marcas que tiene. Este proceso que se realiza en el laboratorio revela la huella tras un proceso químico, lo que la hace apta para poder ser ingresada al sistema APFIS.